El camino que “yo creo”
Al camino lo soñamos como una línea recta. Creemos que no habrá obstáculos.
Y ahí está el suceso inesperado. El momento en que la vida nos vuelve a dar la posibilidad de aprender.
Cada paso es creer en el camino y crear el camino, que se conjugan en el presente como el camino que “yo creo”.
Cada obstáculo en el camino es lo que queramos que sea. El obstáculo nos puede impedir seguir, limitarnos o frenarnos. Nos puede generar bronca, tristeza, pena, miedo, resentimiento, resignación, entre tantas emociones.
O, todo lo contrario. El obstáculo puede ser otro momento más de aprendizaje.
A veces no queremos tanto aprendizaje y que las cosas se faciliten un poco más, sobre todo en esos momentos de impacto emocional. Pero solo podemos controlar nuestras decisiones y acciones.
Entonces, con el próximo obstáculo en el camino ¿Qué haremos?
“Los obstáculos no obstruyen el camino, ellos son el camino.”, Proverbio Zen